Biomecánica de los arcos del pie

Hoy vamos a hablar sobre algo un poco diferente a las anteriores. Los arcos del pie y  su biomecánica. Lo primero que debemos de saber antes de empezar es la anatomía del pie. El pie se va a dividir en huesos del tarso, metatarsos y falanges. El tarso está conformado por 7 huesos: calcáneo, astrágalo, cuboides, escafoides (lo puedes también encontrar como navicular) y 3 cuñas. Luego entre los huesos del tarso y las falanges están los metatarsos, estas van a ser 5, una por cada dedo. Finalmente tenemos las falanges, que vamos a tener las proximales, mediales y distales, una por cada dedo excepto que el primer ortejo carece de falange medial. 
El pie está conformado por 3 arcos: el interno, externo y anterior. El arco interno del pie o también llamado arco longitudinal medial está conformado por el calcáneo, astrágalo, escafoides, la primera cuña y el primer metatarsiano, es sostenido principalmente por el tibial posterior, el flexor largo común de los dedos y el flexor largo propio del dedo gordo. Mientras que el arco externo o arco longitudinal lateral incluye al calcáneo, cuboides y quinto metatarsiano, este arco es sostenido principalmente por el peroneo lateral largo y el peroneo lateral corto. Por último el arco anterior o transverso lo forman las 5 cabezas de los metatarsianos.
La disposición de los huesos y la unión de los tres arcos van a formar la bóveda plantar. Esta se va a encontrar en la parte media y va a ayudar a la resistencia para la carga de peso y el esfuerzo. Esta va a formar un triángulo y los vértices del triángulo va a ser apoyo trípode, calcáneo, primer y quinto metatarsiano, por lo que podemos observar que no va a ser un triángulo equilátero. 
El pie va a tener sus propias funciones que realmente nos van a hacer una diferencia en nuestro día a día, entre ellas hay que acordarnos que el pie nos ayuda a caminar, correr y saltar, gracias al impulso que es dado por los arcos. También a causa de todo el funcionamiento podemos mantener el equilibrio. En especial los arcos del pie tienen varias funciones más como equilibrar o esparcir el peso del cuerpo sobre los distintos puntos para poder mantenernos erguidos, nos ayudan a amortiguar las cargas que le damos en el día a día, dependiendo como sea el terreno el pie se pueda adaptar con una mayor facilidad, etc. 
Al aumentar o disminuir los arcos vamos a encontrar distintas variaciones, las más comunes son el pie cavo y el pie plano. El pie cavo es cuando hay una elevación de la bóveda plantar, por lo que los arcos se verían aumentados.  m
Mientras que el pie plano es cuando los arcos se colapsan y disminuyen por lo que en un caso más avanzado la planta completa tocaría el piso. A continuación encontramos una imagen donde se explican ambos casos. 

Después de indagar un poco más sobre los arcos del pie me pude dar cuenta que tan importante es conocer su mecanismo ya que como vimos nos va a ayudar a poder realizar nuestro día a día de una manera mucho más eficiente , pero más que nada creo que los arcos nos ayuda a que nuestro cuerpo no esté tan expuesto al mundo tan peligroso en el que vivimos. 

Si te gustaría leer un poco más te dejo la referencia en formato APA de donde yo pude completar la información y saque algunas imágenes. 
PERALTA, S.,  SANTISTEBAN J. (2017). RENDIMIENTO ACADÉMICO EN EL ÁREA DE EDUCACIÓN FÍSICA RELACIONADO AL TIPO DE HUELLA PLANTAR EN NIÑOS DE 6 – 12 AÑOS DE UN COLEGIO DE LIMA.. 10/04/20, de UCSS. Sitio web: http://repositorio.ucss.edu.pe/bitstream/handle/UCSS/185/Peralta_Santisteban_tesis_bachiller_2017.pdf?sequence=7&isAllowed=y

Nicole K.A.

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